Las comunidades están dejando toda forma de pobreza

En lo físico

• Aumento en los ingresos. Por lo general, los ingresos se incrementan de 5 a 10 veces (y hasta en 20 y 30 veces). A medida que los agricultores aprenden habilidades básicas para la administración del dinero, ellos comienzan a ver cuáles de sus cultivos no les deja ganancias y pueden manejar mejor su dinero y estar menos propensos a adquirir préstamos con altos intereses o vender de antemano sus cosechas con una pérdida significativa. Las comunidades también empiezan a construir caminos hacia sus áreas de cultivos. Como resultado de esto, los agricultores pueden llevar sus cosechas más fácilmente y les permite sembrar más. Con frecuencia, los agricultores se ayudan mutuamente de manera gratuita para no desperdiciar dinero en fiestas y dar de comer a aquellos que ayudan en el campo, como era la tradición. A medida que van entendiendo que Dios espera que ellos trabajen como para Él, los agricultores comienzan a trabajar más duro cuidando su tierra y siendo buenos administradores.
• Mejora en la salud. Otra área con cambios significativos es la salud. Conforme las familias van entendiendo la importancia de cuidar sus cuerpos para que así puedan servir a Dios, ellas rápidamente empiezan a adoptar una serie de prácticas saludables, tales como saneamiento, nutrición e higiene. Igualmente aprenden a cómo tratar adecuadamente las enfermedades comunes como fiebre o diarrea.
• Viviendas estables. En la mayoría de las áreas, la iglesia con frecuencia construye casas estables para las familias más pobres. Estas sencillas casas están hechas a menudo de barro, bambú o de un material de madera que es muy accesible. Se recaudan fondos para comprar otros suministros tales como clavos y material para los techos etc. La iglesia y algunas veces los miembros de la comunidad ofrecen su obra de mano gratuitamente.

Social

• Las relaciones con la comunidad mejoran. Cuando la iglesia demuestra el amor de Dios hacia su comunidad, y especialmente hacia los pobres, ella gana su respeto y confianza. Los no creyentes con frecuencia van a la iglesia para aprender más de aquellos que aman a otros. El 96 por ciento de las iglesias reportaron una mejora en su relación con la comunidad.
• Las relaciones familiares mejoran. La violencia familiar es común. A medida que los esposos son desafiados a amar a sus esposas, ellos comienzan a servir a sus esposas, ayudándolas a buscar agua o leña. Las esposas aprenden a mostrar respeto y ya no están con “los ánimos caldeados o malhumoradas.” Por consiguiente, los matrimonios se fortalecen y son más felices. Conforme los padres aprenden diferentes técnicas de crianza, ellos educan a sus hijos de una manera más cómo Cristo lo haría. (Una buena noche de descanso y de sueño)
• Las comunidades trabajan conjuntamente en los proyectos. Al principio, los miembros de la comunidad observan a la iglesia mientras sirve. Están confundidos por tales extrañas actividades. Sin embargo, los miembros de la comunidad rápidamente se dan cuenta que la iglesia está haciendo algo beneficioso para todos ellos y empiezan a trabajar lado a lado de ella para llevar a cabo los proyectos.

Mental

Los niños asisten a la escuela

Muchas comunidades no cuentan con escuelas. Aquellas que sí tienen escuelas, normalmente los niños solo van los primeros grados. Las iglesias asumen un rol activo en promocionar la educación y cuando no existe una escuela en la comunidad, con frecuencia la iglesia construye una. Durante los tres primeros años del proyecto, el porcentaje de niños que asistían a la escuela primaria dio un salto del 16 por ciento al 78 por ciento; la asistencia a colegio secundario aumentó del 5 por ciento al 30 por ciento.

La alfabetización va en aumento

El analfabetismo decae del 67 por cientos al 32 por ciento cuando las iglesias llevaron a cabo programas de alfabetización en sus comunidades.